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afrol News / The Standard, 02.02.2003 - La oposición pro-democrática de Zimbabwe se está despertando ante un brote de diálogo democrático interno. Entre las voces que más se oyen, no destaca sin embargo la del líder del MDC, Morgan Tsvangirai, demasiado débil para conducir a los zimbabwos a la acción masiva anti-Mugabe que todos está esperando. Tsvangirai responde que "no es el comandante de un ejército" y que las masas deben organizarse ellas mismas. Bornwell Chakaodza, editor del semanario independiente de Zimbabwe 'The Standard' rompió esta semana el silencio sobre las capacidades personales de Tsvangirai, líder del Movimiento para el Cambio Democrático (MDC). En un artículo de opinión, el conocido e influyente redactor metió el dedo en la llaga al plantear una discusión que cada vez pide más y más la población de Zimbabwe: "¿Cuando vamos a derrocar finalmente la dictadura del Presidente Mugabe?" - Los zimbabwos necesitan un una dirección enfocada y necesitan héroes, precisó Chakaodza en su artículo. Buscando ejemplos sobre cómo ganar la lucha popular contra el régimen del Presidente Robert Mugabe y su partido ZANU-PF, el editor señaló Sudáfrica. Allí, el ANC "aprendió rápidamente que la lucha necesitaba ser mantenida en los municipios donde tenía un apoyo abrumador", citó Chakaodza en un llamamiento de atención a la dirección del MDC. En la edición de hoy de 'The Standard', el líder de la oposición, Tsvangirai, contesta a la crítica. Admite que está bajo una enorme presión para organizar en una cierta forma un levantamiento de masas, dijo Tsvangirai señalando que las críticas que se vierten contra él en la prensa independiente no están justificadas. - Las llamadas a una movilización de masas son una señal de desesperación pero no es como ir a un picnic, decía Tsvangirai en 'The Standard'. "No deseamos algo que no esté bien coordinado y estructurado. No soy el comandante de un ejército, solamente soy líder de un partido de la oposición. La crisis de Zimbabwe no es una cuestión de Tsvangirai, sino la preocupación de todos los zimbabwos. El pueblo debe organizarse para reclamar su poder. Cuando el pueblo esté preparado para actuar, lo hará y nosotros le apoyaremos", añadió el líder del MDC.
Tsvangirai agregó que "lo que el pueblo debe entender es que estamos en una lucha que debe ser larga y que no se pueda lograr 10 meses después de unas disputadas elecciones. La gente no aprende de su historia. ¿Cuanto tiempo nos llevó comenzar la lucha de liberación contra el régimen de Ian Smith?" Muchos de los opositores en Zimbabwe - quienes han seguido con gran interés la rápida movilización de masas organizada en Madagascar por el ahora Presidente Marc Ravalomanana - no están de acuerdo con Tsvangirai. Aunque el MDC es claramente la alternativa democrática al gobierno del país, muchos nuevos grupos y organizaciones están emergiendo para agitar la impaciencia popular y contrarrestar la actitud pasiva del MDC. Por ejemplo, el nuevo grupo Zvakwana Sokwanele (que traducido significaría "Bastante es Bastante") está siguiendo el ejemplo argentino, organizando su campaña de "Haz ruido por la libertad". Cada día a las ocho de la noche partidarios en varias zonas de Harare salen a las calles para silbar y golpear sus cacerolas en protesta contra el hambre que están sufriendo como resultado del régimen de Mugabe. "Hacemos esto a las ocho para boicotear la hora de la retransmisión de las noticias con propaganda gubernamental", sostiene el grupo. La sociedad civil se ha organizado en la Asamblea Constitucional Nacional (NCA), agrupando a organizaciones de derechos humanos, iglesias, sindicatos, grupos de mujeres, profesionales e individuos. La asamblea, que exige principalmente una nueva y "popular constitución", está intentando organizar movimientos de masas, tales como huelgas y manifestaciones. Con su petición de una nueva constitución, la NCA, sin embargo, parece no poder tratar las necesidades principales de Zimbabwe. Los zimbabwos todavía mantienen, en su mayoría, la esperanza de que el MDC y Tsvangirai les conduzcan a una movilización de masas, como el líder del partido había indicado antes de las elecciones. Habiendo dado sus votos al MDC, la población está cada vez más decepcionada ante los grandes discursos y abundantes palabras pero la falta de iniciativas por parte del líder del partido. Mientras tanto, el alcalde de Harare, Elias Mudzuri, del MDC, está incrementando su fama y popularidad debido a sus esfuerzos por resistir los ataques que el gobierno lanza contra él. Mudzuri continúa realizando discursos y organizando reuniones, desafiando las acciones de la policía y las detenciones. "Todo lo que ahora espero es que el MDC realice cambios para sustituir a Tsvangirai por Mudzuri, que parece ser infinitamente más enérgico e inspirador", escribe Denford Magora en una carta al editor de 'The Standard'. La llamada de Chakaodza a una discusión sobre cómo continuar la lucha contra el régimen de Mugabe encuentra una respuesta positiva entre los lectores. "Continúe con su buena lucha, señor redactor" le escribía un lector de Harare. También un lector de Harare aplaudió "el oportuno llamamiento a despertarse" del editor al MDC: "todavía hay un amplio residuo de voluntad pública para Morgan Tsvangirai, pero ése pronto desaparecerá si no se le ve conduciendo el frente. Mudzuri y otros alcaldes del MDC están sufriendo ataques - tanto físicos como políticos -. Si Tsvangirai se oculta, dejará de ser entonces imprescindible para la gente y el futuro de Zimbabwe". Mientras tanto, el consejo ejecutivo nacional del MDC se reunió ayer en Harare para discutir, entre otros temas, la movilización de las masas. Paul Themba Nyathi, el portavoz del MDC, dijo a 'The Standard' que un número de miembros ejecutivos sentía que el partido se debe preparar para encaminar las acciones de movilizaciones. Nyathi añadió que "la situación económica por la que atraviesa la nación es tal que los zimbabwos deben apoyarse en una estrategia de supervivencia nacional que implique ausencias laborales masivas. El MDC movilizará a la población de Zimbabwe para llevar a cabo acciones contra el ilegítimo gobierno. A su debido tiempo anunciará la nueva línea de conducta". El propio Tsvangirai tendrá que presentarse mañana ante la justicia
para hacer frente a los cargos de traición, junto con el Welshman Ncube,
Secretario general del MDC, y otros altos representantes del MDC.
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