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afrol News, 14.02.2002 - Morgan Tsvangirai, líder de la oposición política de Zimbabwe y candidato presidencial, fue acusado, en un documental televisivo australiano, de haber participado en un complot para asesinar a su rival, el Presidente Robert Mugabe. Tsvangirai, Presidente del Movimiento para el Cambio Democrático (MDC), ha desmentido hoy todas las acusaciones en un comunicado. - Reiteramos que nunca hemos tomado parte en ninguna conspiración para asesinar al Presidente Mugabe ni tener el deseo de hacerlo, afirma la declaración del MDC. "Creemos en el proceso electoral y el cambio de gobierno a través de la votación del pueblo". Una edición especial de Australian SBS Dateline titulada "Asesinato de Mugabe - La Conspiración de Tsvangirai", mostraba la "actual evidencia de que el líder de la oposición no tenía la intención de dejar al proceso electoral seguir su propio curso. Mientras mostraba sus credenciales democráticas, Tsvangirai se encontraba, de hecho, dentro de un complot para asesinar al Presidente Robert Mugabe", es como SBS presentaba el documental. Las acusaciones llegaron en el momento más inconveniente para Tsvangirai, que precisamente acababa de comenzar la campaña para las elecciones presidenciales. Los serios cargos contra él podrían disminuir su credibilidad entre la población zimbabwa e incluso perder su posibilidad de candidato. Tsvangirai sostiene que se trata de una campaña del ZANU-PF, el partido en el poder. El documental de SBS mostraba una secuencia en blanco y negro de unos ocho minutos, aparentemente filmada en secreto, en la que aparecían cuatro hombres discutiendo sobre la situación política en Zimbabwe. Según el programa, los cuatro hombres que se encontraban eran representantes de una empresa de consultas políticas canadiense y un hombre descrito en el documental como "el líder del MDC", pero es imposible identificarlo por la calidad del film. La persona que supuestamente es Tsvangirai habla sobre lo que ocurriría en Zimbabwe después de que "el jefe del estado haya sido eliminado". Morgan Tsvangirai ha confirmado hoy que, de hecho, mantuvo una reunión con la empresa de consultas canadiense "Dickens and Madison", donde un llamado Ari Ben-Menashe "sacó repentinamente la discusión sobre el tema de la eliminación y continuo repitiendo extrañas preguntas," llevándole a "salir demostrativamente de su reunión." Según el MDC, los consultadores canadienses habían contactado al partido el año pasado diciendo que querían ayudarles a construir una imagen del MDC en el extranjero, donde Mugabe estaba llamado a ser el ganador de la guerra propagandística, a través de su grupo de lobby Cohen and Woods. Un alto representante del MDC tenía viejos y amistosos contactos con la compañía, facilitándose así el contacto. Tsvangirai reconoce un total de cuatro reuniones con el grupo de canadienses. "No hubo mención alguna sobre la eliminación o asesinato del Presidente Mugabe por Dickens y Madison" durante las tres primeras reuniones, dice Tsvangirai. - En la cuarta reunión, Menashe seguía caminando desde los asuntos sobre los que se había discutido previamente, dice el comunicado de Tsvangirai, añadiendo que él, de repente, sacó el tema de eliminar a Mugabe. "Era en ese momento en el que abandoné la reunión debido a que Menashe estaba introduciendo temas que no tenían ninguna relación con los objetivos de su ocupación dentro del lobby de comunicación." Después de la reunión grabada secretamente, Tsvangirai reunió a su partido para tratar esta "sospechosa conducta de Dickens and Madison" e inició una investigación a fondo sobre la compañía y Ben-Menashe. Según Tsvangirai, las investigaciones de su partido establecieron que Menashe había sido contratado por el ZANU-PF para colocar al MDC bajo la situación que ellos querían para estar comprometidos dentro del lobby. También quedó establecido que el grupo había trabajado con Nicholas Goche, Ministro de Seguridad Nacional y George Charamba, Secretario Permanente de la Oficina de Publicidad e Información del Presidente." - Cuando todos estos hechos fueron conocidos, el MDC cortó toda la comunicación con este grupo ya en diciembre de 2001, asegura Tsvangirai, manteniendo que el "MDC continua deseando el cambio constitucional y pacífico del gobierno." Por otro lado, "The Herald", diario controlado por el gobierno, establece en su última edición que Tsvangirai estaba envuelto en "un complot para asesinar al Presidente Mugabe". 'The Herald' afirma que tiene un comunicado de Dickens and Madison en el que afirman que fueron "contratados para matar al Presidente Mugabe. La reunión en Montreal, que filmaban, iba a tratar como se instalaría en el poder a Tsvangirai después del asesinato." Sin embargo, Dickens and Madison no tenía intención alguna de cumplir con el contrato. - A principios de noviembre [2001], en los ambientes civilizados del club RAC de Londres, se conjuraron los detalles sobre como asesinar al Comandante Mugabe, informa 'The Herald' a sus lectores. "Se garantizaba un pago de 500.000 dólares y se prometieron futuros contratos con el gobierno de Tsvangirai." No se publicado todavía comunicado alguno del gobierno sobre el asunto. El gobierno, sin embargo, podría culpar la traición del jefe del MDC por las acusaciones de Dickens and Madison, previniendo así su candidatura a la presidencia. Sin embargo, Tsvangirai no toma en serio la "campaña denigratoria" del gobierno ya que "esta historia de asesinato es similar a muchas otras lanzadas que carecen de fundamento."
Fuentes: Basado en MDC, SBS, The Herald, prensa internacional y archivos de afrol
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