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afrol news, 21.06.2002 - Mauritania ha alcanzado su objetivo bajo el marco de trabajo de la Iniciativa de los Países Pobres Fuertemente Endeudados (HIPC, por sus cifras en inglés), lo que significa que el perdón del servicio de la deuda del país a todos los acreedores ascenderá a aproximadamente unos 1,1 mil millones de dólares en un cierto plazo. Según una declaración hecha ayer por el Fondo Monetario Internacional (FMI), el valor actual neto de la deuda externa total de Mauritania se ha reducido, de este modo en un 50 por ciento. El Fondo estima que ello debe proporcionar "una buena base para el sostenimiento de la deuda a largo plazo." Los pagos del servicio de la deuda se recortan substancialmente - desde unos 88 millones en 1998 (pagados antes de la ayuda de HIPC) hasta un promedio de 35 millones en 2003, y hasta un promedio aproximado de 39 millones por año entre 2002-2011, con HIPC y las fuentes adicionales de la condonación de la deuda incluidas. Consecuentemente, el servicio de la deuda como porcentaje del crédito del gobierno se reduce a partir de 35 por ciento en 1998 hasta un promedio anual del 11 por ciento durante el mismo período. - Los recursos puestos a disposición gracias a la condonación de la deuda se esperan que sean destinados a financiar los programas de lucha contra la pobreza, declaró ayer el FMI. Mauritania había fijado metas muy ambiciosas para sus políticas de reducción de la pobreza. Mauritania se había fijado la ambiciosa meta de reducir la pobreza al 40 por ciento de la población por el punto de la terminación. Esto representaría una reducción a partir de un 50 por ciento en 1996 y un 56 por ciento en 1990. Aunque el progreso se consiguió al reducir la pobreza a un 46 por ciento en el año 2000, según los datos más recientes, la ambiciosa y prevista reducción de un 10 por ciento no se producirá. Este objetivo, así como otros objetivos sociales, ahora se consideran poco realistas y el gobierno ha revisado estos objetivos 2004. Para ser incluida en el programa de HIPC, Mauritania tuvo que aceptar las "reformas estructurales y la consolidación institucional", en la cual el país tenía "que realizar progresos substanciales ". Ellos han incluido privatización, reformas fiscales y recorte del gasto público. Mauritania, sin embargo, ha establecido un record muy fuerte del excedente de la actuación económica durante varios años. El crecimiento del PIB aumentó un 4,8 por ciento en 2000/01 (por encima del promedio de 4,2 por ciento sobre 1995-1999) a pesar del impacto de las adversas condiciones económicas globales en la segunda mitad del año 2001.
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