afrol News, 07.07.2003 - El intento de golpe de estado que sacudió a Mauritania hace ahora un mes provocó una larga serie de incertidumbres durante y tras las horas en las que el Presidente y su gobierno no dieron señales de vida. Un mes después, y con elecciones legislativas a la vista, las policía ha detenido a una amplia serie de altos cargos supuestamente relacionados con el golpe, aunque las investigaciones no parecen arrojar mucha información y aumenta la inestabilidad política y económica. Ante la sorpresa de la población mauritana, de los gobiernos vecinos y de los países tradicionalmente amigos y colaboradores de Mauritania, el gobierno pro-occidental del Presidente Maaouiya Ould Sid Ahmed Taya sufrió un golpe de estado el pasado mes contra la elite y clanes familiares que ostentan el poder en Nouakchott. Cuatro semanas después del intento de golpe, sin embargo, pocas conclusiones sobre los autores y las causas que conllevaron al golpe han salido a la luz y los riesgos de inestabilidad política y económica siguen latentes en el país africano, clave en las relaciones entre el Magreb y el África subsahariana. Sigue sin conocerse la identidad de los rebeldes que provocaron el intento de golpe. A pesar de que las tropas gubernamentales capturaron a algunos rebeldes, la mayor parte consiguió huir. A pesar de que el gobierno mauritano sostiene que la situación está bajo control, algunos gobiernos extranjeros no muestran la misma tranquilidad y, de hecho, una fuerza de evacuación formada por 34 militares estadounidenses ha llegado a la región ante una posible nueva emergencia. A pesar de que Taya ha anunciado que las elecciones presidenciales se mantendrán, tal y como estaba planeado, el próximo mes de octubre, la seguridad en las calles de la capital se ha visto notablemente incrementada en las últimas semanas. Las fuerzas armadas se han apostada a la entrada del palacio presidencial, así como a los alrededores de los estudios de televisión y radio públicas, además de efectuar registros, durante la noche, de todos los vehículos que circulan por la capital. Económicamente, la llegada de capital extranjero ya se ha visto
afectada, además de la industria del turismo, ya que algunos países
recomiendan a sus ciudadanos no viajar a Mauritania.
|