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afrol News, 09.07.2003 - La que ha sido la huelga general más sangrienta de la historia democrática de Nigeria ha finalizado. Ayer, el principal sindicato del país ponía punto final a una huelga de ocho días de duración motivada por el aumento de los precios de los combustibles en un 50%. En los últimos días, el recrudecimiento de los enfrentamientos entre policía y trabajadores se ha saldado con la muerte de al menos 14 manifestantes. Las fuerzas sindicales nigerianas anunciaron el martes la finalización de una huelga general de ocho días como protesta ante el aumentos del precio del combustible y aceptaron un descenso en la subida como compromiso ofrecido por el gobierno. Líderes del Congreso Nigeriano del Trabajo (NLC), tras largas deliberaciones, decidieron aceptar la oferta del gobierno, con el litro de gasolina se situará a un precio de 34 nairas (aprox. 0,25 euros). La subida con respecto al actual precio será sí de un 31 por ciento, en lugar del 50 por ciento que anunció el pasado mes de junio el gobierno del Presidente Olusegun Obasanjo. Fuentes sindicales, sin embargo, no han ocultado su decepción al tener que llegar a este acuerdo y aceptar el ultimátum gubernamental, dada la situación de la población en las calles de Nigeria, apoderadas por el caos en los últimos días. - Dado el sufrimiento y las privaciones que han sufrido los nigerianos en los últimos días, el NLC tenía un deber para servir al pueblo (...) suspendiendo la huelga, declaraba ayer Adams Oshiomhole, Presidente del sindicato. Durante los ocho días de huelga general - iniciado el pasado lunes -, las fuerzas del orden han atacado a los manifestantes, acabando con la vida de, al menos, 14 personas. La violencia se fue apoderando de las calles de Lagos, donde los alborotos se repitieron especialmente en los últimos dos días de la huelga. Por su parte, la policía lanzaba ayer también su versión de los hechos, negando tener cualquier tipo de responsabilidad en los asesinatos de los manifestantes ocurridos en los últimos días. Fuentes policiales mencionaban la posibilidad de que los responsables de las muertes fuesen "matones" que provocaban los altercados. Después de que el caos se apoderase de Lagos, y a pesar del anuncio de
la finalización de la huelga, la tranquilidad no había vuelto ayer por la
noche a la ciudad, en la que todos los establecimientos comerciales
continuaban cerrados.
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