afrol News, 25.03.2003 - Las operaciones petrolíferas se han visto reducidas en la zona del delta del río Níger después de que el pasado jueves se produjese una matanza en la que unas sesenta personas perdieron la vida. La matanza se produjo entre miembros armados de la etnia Ijaw y las fuerzas militares, según han informado fuentes militares. La producción petrolífera se ha visto por ello reducida en un 10 por ciento. Las actividades de exportación de petróleo se han visto así reducidas en los últimos días en un 10 por ciento, algo bastante significativo si se tiene en cuenta que en la zona se produce una media diaria de unos dos millones de barriles. La matanza se produjo en la aldea de Okerenkoko, situada a las orillas del río Níger, entre miembros armados de la etnia Ijaw y las fuerzas armadas. Según activistas de las comunidades federadas del Delta del Níger, las tropas armadas con ametralladoras y bazucas atacaron sus posiciones, matando por lo menos a 50 de los militantes. Este nuevo enfrentamiento es un paso más en el conflicto que se vive en la zona, donde en el pasado mes de febrero estalló una lucha en la ciudad de Warri, entre las comunidades urhobo e itshekiri, en relación con la delineación de las mesas electorales ante las elecciones presidenciales que tendrán lugar en Nigeria entre los próximos meses de abril y mayo. Al parecer, la tensión en la zona petrolífera del delta del río Níger aumentó cuando la comunidad urhobo comenzó a exigir una modificación de los límites del distrito electoral que, según alega esta comunidad, favoreca a los itshekiri. Según ha explicado un portavoz de las comunidades federadas del Delta del Níger, las tropas militares se han involucrado en el conflicto que viven las dos comunidades, aunque los militares han decidido tomar parte a favor de una de ellas, ya que sólo atacan a los miembros de la etnia Ijaw. Dos de las principales empresas petrolíferas que operan en la región, Royal/Dutch Shell y ChevronTexaco, se han visto obligados a retirar de la zona a sus operarios y al resto del personal, teniendo que cerrar temporalmente sus instalaciones. La pasada semana, las autoridades nigerianas enviaron más tropas
militares a la zona, esperando realizar una estrategia con la que la calma
vuelva a reinar en el delta del río Níger.
|