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afrol News, 15.04.2002 - El Goberno de Sudán ha intensificado en los últimos meses su ofensiva militar sobre varios condados del sur del país con vistas a conseguir la despoblación de estas zonas y que las compañías petrolíferas puedan explotar su subsuelo sin ningún problema. Esta es una de las conclusiones del informe Despoblando las regiones sudanesas del petróleo, elaborado por 70 ONG europeas. A través del informe, difundido ayer martes por la Coalición Europea sobre el Petróleo en Sudán (ECOS), que aglutina a 70 ONG europeas, entre ellas la española INTERMÓN OXFAM, describe la práctica que emplea el Gobierno de Sudán: los helicópteros de combate del ejército bombardean los poblados, y seguidamente tropas y milicias del gobierno entran por tierra saqueando todo lo que encuentran, incendiando las chozas y sembrando de minas antipersonales los caminos de retorno y los lugares de alimento del ganado. De este modo, el gobierno sudanés expulsa a los habitantes e impide su retorno. El gobierno de Sudán alega que estas prácticas forman parte de la guerra que mantiene contra el SPLA (Ejército Popular para la Liberación de Sudán). Sin embargo, los equipos de investigación de ECOS, que en febrero y marzo de este año estuvieron en las zonas bombardeadas, concluyeron que no había rastro de tropas del SPLA en los poblados afectados, y que el ejército sudanés no encontró la más mínima resistencia durante los ataques. En los últimos meses, las ofensivas se han concentrado en el condado de Ruweng y en la región del Alto Nilo del Oeste. En Ruweng se encuentran las concesiones petroleras Bloque 1 y Bloque 2, mientras que en el Alto Nilo está el Bloque 5A. Se estima que son 130.000 las personas que recientemente han huido de estas zonas y en la actualidad buscan un lugar más seguro donde reiniciar sus vidas. Muchos de ellos sufren una grave escasez alimentaria. El bloqueo aéreo que el gobierno sudanés mantiene sobre estas zonas dificulta la labor humanitaria de las ONG. INTERMÓN OXFAM trabaja en Sudán, el país más extenso de África, desde 1992. En los últimos meses, la mayor inversión ha sido la compra de una perforadora de pozos que, con una capacidad de alcanzar los 60 metros de profundidad en 48 horas, ha servido para horadar en el último año 30 pozos de agua. La ubicación de los pozos constituye una de las mayores dificultades, por cuanto deben ser construidos bajo árboles frondosos que impidan a los aviones bombarderos localizarlos desde el aire.
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