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afrol News, 02.02.2002 - De nuevo, el Presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang Nguema, vuelve a ser noticia en relación con sus atribuidos problemas de salud. Obiang se ha visto obligado a viajar de forma "urgente" y "precipitada" a París. El gobierno no explica los motivos del viaje y la oposición afirma que se encuentra hospitalizado a causa de un cáncer de prostata. La historia, una vez más, se repite. Desde hace varios años existen fuertes rumores de que el Presidente ecuatoguineano padece un cáncer de próstata que le obliga a desplazarse continuamente al extranjero. Sin embargo, tanto el propio Presidente como su gobierno lo han negado hasta la fecha. El Partido Democrático de Guinea Ecuatorial (PDGE), en el poder, reconoció ayer que Obiang se había trasladado a París, pero no se dieron a conocer los motivos de la visita. El Director General de Seguridad Nacional y hermano del Presidente, Antonio Mba Nguema, en declaraciones a EFE, confirmó la noticia del viaje y defendió su carácter privado alegando que "el viaje del mandatario guineano a París no es oficial, pues el presidente es una persona. Tiene sus cosas privadas como persona". Mientrastanto, la oposición ha denunciado fuertemente al gobierno por ocultar que el Jefe de Estado salga del país sin comunicarlo a la población. Según información de la fuerza opositora Unión de Demócratas Independientes (UDI), Obiang podría estar ingresado en el "Hospital Americano de París" para ser tratado por el cancerólogo Bernard Debré, antiguo ministro, quien hace unos años operó al presidente francés FranVois Mitterrand, fallecido en enero de 1996, de su cáncer de próstata. La información no ha sido, en ningún caso, confirmada ni desmentida por las autoridades de Malabo. Obiang, de 60 años, tan sólo ha declarado a medios estatales del país, al respecto de estos rumores, que se tratan de el "fracaso de aquella prensa que, ni respeta la intimidad de las grandes personalidades ni entiende lo que es la ética profesional". En 1999, el presidente reconoció públicamente haber tenido una recaída a causa de paludismo. Pero, para evitar malos entendidos, se apresuró a admitir se sentía "todavía joven, capaz de combatir, como un chico de 25 o 30 años".
Fuentes: Basado en La Diáspora, EFE y archivos de afrol
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